Descripción
CARTA APOSTÓLICA DEL SANTO PADRE FRANCISCO EN EL IV CENTENARIO DE LA MUERTE DE SAN FRANCISCO DE SALES
La Carta Apostólica Totum Amoris Est (Todo pertenece al amor), escrita por el Papa Francisco con motivo del IV centenario de la muerte de san Francisco de Sales, resalta la herencia espiritual de este gran santo, quien procuró la oración humilde y perseverante en la apertura al Espíritu Santo. Además, puso en práctica una proyección pastoral que lo llevó a experimentar en su corazón, dócil a la fe y al amor de Dios, un gran amor por la Iglesia y para la Iglesia.
San Francisco de Sales ostenta el título de doctor de la Iglesia y es considerado el patrono de los escritores y periodistas católicos. San Juan Bosco fue su gran admirador, por ello dedicó su congregación y familia religiosa al “doctor de la amabilidad” (Familia Salesiana).
Se le reconoce porque “fue apóstol, predicador, escritor, hombre de acción y de oración; comprometido en hacer realidad los ideales del Concilio de Trento; implicado en la controversia y en el diálogo con los protestantes, experimentando cada vez más la eficacia de la relación personal y de la caridad, más allá del necesario enfrentamiento teológico; encargado de misiones diplomáticas a nivel europeo, y de tareas sociales de mediación y reconciliación”. Pero, sobre todo, fue intérprete del cambio de época y guía de las almas en un tiempo que tenía sed de Dios de un modo nuevo.
Además de ser pastor, escritor y buen conciliador, fue cofundador de la Orden de la Visitación de Nuestra Señora junto con santa Juana Francisca de Chantal. El Papa Francisco señala que es un santo para nuestro tiempo porque “nos invita a salir de la preocupación excesiva por nosotros mismos, por las estructuras, por la imagen social, y a preguntarnos más bien cuáles son las necesidades concretas y las esperanzas espirituales de nuestro pueblo”.